A mí el mal genio se me nota en la cara, en la forma de hablar, de
mirar, de respirar y en las ganas de querer asesinar, pero nada más.
Consejo del día: Hable lento, pero piense rápido.
“Dígale cuanto la ama todos los días, porque aunque parezca absurdo el simple detalle le va a encantar.”